Las Leliqs no caminan en calles de tierra
Por Mariela Montiel.
Esta semana, hemos estado hablando de la nota del economista Alfredo Zaiat que fue “recomendada en su lectura” por la vicepresidenta Cristina Fernández.
Una nota que devuelve un poco de seriedad a la discusión sobre las relaciones y posibles acuerdos que está pensando el Ejecutivo Nacional para remontar la economía doblemente destruida: principalmente a nivel nacional por el macrismo, su timba financiera y fuga de dólares y a nivel mundial por la parálisis temporal a causa de la pandemia. Mientras la barriada organiza ollas populares para abrazar a los compatriotas, en otros ámbitos del campo nac and pop, se trabaja bajo la misma línea, se piensa cómo hacer que los números cierren con el pueblo adentro. Pero es necesario, como lo hizo la Jefa, a partir de ciertos gestos, poner las cosas claras, para mantener la alianza.
Compañeras y compañeros, vamos a hablar de algo que jamás hemos visto. Comprendamos qué son, para qué sirven y cómo influyen en la economía popular las LELIQ. Sabelo que mientras nosotros le agregamos agua al Plusbelle de manzana, otros se la llevan en pala. Nunca se toma conciencia de algo que no se conoce. Asique, dale, poné la pava y lee.
Las Leliqs son Letras de Liquidez del Banco Central, es como un bono o un préstamo que toma el Banco Central de la República Argentina (BCRA) con los bancos por una semana. A diferencia de las Lebac, que las podían adquirir cualquier persona (claramente para los que andamos con SUBE, no), las Leliqs sólo están disponibles para las entidades financieras. En otro artículo de mi autoría para IC “El dólar no camina en calles de tierra” te explico qué es la política monetaria y el BCRA. Sigamos.
¿Qué es una Letra? un documento oficial que emite el BCRA ¿Para qué sirve? Digamos que para contener la inflación y la emisión (hacer billetes) y evitar que los especuladores compren dólares. Tienen su inicio en enero del 2018, durante la presidencia de Sturzenegger, que luego fue profundizada por Sandleris. El objetivo de estos representantes del capital extranjero (sentados en el Banco de todos los argentinos) ha sido contener la compra de dólares y la especulación en moneda extranjera. ¿Funcionó? No. Claramente, se evitó que los bancos compraran dólares, pero no se logró poner límite a la especulación. En las líneas que siguen te explico las causas
Como ya sabemos, Cambiemos representa a los intereses extranjeros, a capitalistas que tienen empresas en el país, pero que no se los puede considerar “nacionales” ya que la ganancia que producen con el sudor de los y las trabajadoras argentinas, no es invertida nuevamente en esta Patria, sino que se la llevan a otros países. ¿Cuál es la consecuencia? Que nosotros laburamos en el taller de mesas de Don Julio, en 12 horas producimos cada vez más mesas, esa mayor producción no se refleja en nuestro salario, don Julio vende cada vez más mesas y con la guita, en vez de tomar a tu hijo para producir más empleo (y ganancia) le da de comer a un banco extranjero. Y tu hijo, como es el mío, está desempleado.
Retomemos, entonces las Leliqs son un papel que el BCRA pone a la venta para otros bancos, con el objetivo de que las entidades financieras no compren moneda extranjera (dólar) y generen más deuda, pero ¿cómo hace para que estos elijan comprar Leliqs (papel) y no dólares? (divisas para transacciones comerciales internacionales). Fácil, le vende las Leliqs a $100, (el BCRA se queda con los Pesos Argentinos) y a la semana le devuelve $170 ¿Qué significa? que el BCRA les paga a los bancos privados para que no especulen con el dólar, pero como “daño colateral” esta medida provoca una restricción al crédito, ya que esa tasa de interés se toma de referencia para cualquier crédito a Pymes o para cualquier hijo de vecino ¿Qué trabajador se la juega tomando un crédito con tasa al 70%?
En fin, si bien al simplificar la explicación con fines pedagógicos, dejó de lado otras variables, la realidad es esta. Cambiemos nos destruyó la poco industria que tanto nos había costado construir, nos endeudó con cifras nunca antes vistas, se fugó la guita de cada préstamo pedido al FMI, permitió el blanqueo de riquezas sin pagar un centavo por la evasión originaria y, además, nos metió en este juego vicioso del sistema financiero. ¡y hoy los escuchas dando consejos! Increíbles.
A partir de que el amplio peronismo del que somos partes asume en diciembre, esta tasa de interés se congeló al 38%. Es una para el lado de la justicia, pero, claramente no alcanza. Es necesario profundizar. Antecedentes, tenemos. Siempre nos llevan al Modelo Argentino del peronismo. Antes de que los decretos de la Fusiladora regalen los logros industriales y financieros del peronismo a los norteamericanos y Frondizi aportara con la Ley de Inversiones Extranjeras a perder los núcleos de control estratégico para nuestra economía, los trabajadores podíamos ir al banco del barrio antes de comprar la carne para el asado y depositar en plazo fijo nuestros ahorros. Y luego, ese mismo banco le prestaban al ferretero del barrio para ampliar su negocio.
El tercer peronismo, con el proyecto económico de Gelbard, buscaba mejorar la calidad de vida de los sectores populares y se proponía “que el dinamismo de la economía se vaya trasladando de los monopolios extranjeros […] hacia el conjunto del sector productivo nacional, el Estado y los empresarios nacionales”. Siempre nosotros arreglando el bardo de la derecha.
Concluyendo, varios puntos a tener en cuenta: hay que modificar la mentalidad de nuestra burguesía. La batalla no solo es con la barriada, con Don Carlos que dice “la política no me importa, yo siempre laburé”, también está con los empresarios nacionales. La gran mayoría está liquidando la ganancia de sus abuelos al acceder a la especulación financiera. El peronismo habla con cada sector, establece acuerdos y pactos sociales. Y si esto no funciona es porque la historia y los pueblos exigen a gritos una reforma del sistema financiero, el manejo del comercio exterior, la nacionalización de la política monetaria y un sistema tributario progresivo. No es posible que el litro de leche pague el 21% de IVA, al igual que el vino de $5000 pesos de la” Piba” Bullrich. Prioricemos.
Hasta el 77, la tasa de interés estaba por debajo de la inflación y había unos 700 bancos, un Banco de Desarrollo, un Banco Hipotecario nacional, instituciones financieras del Estado, cajas de crédito en todo el país, mecanismos para la producción porque el negocio era producir.
Desde entonces quedan 20 bancos, en su mayoría extranjeros, que trabajan para llevar la plata afuera. Y no hubo ningún negocio que pueda equipararse con la renta financiera
Según datos del compañero Horacio Rovelli, integrante del IADE, los bancos ganaron de enero a abril de este año (en plena pandemia) $ 65.388 millones “tenemos un ejército que no sale a pelear”. Hay 10 bancos en nuestro país que recibe por intereses de las Leliqs cada mes al equivalente al 60% del IFE que perciben 9 millones de compatriotas.
Compañeros, funcionarios, seamos doctrinarios en lo que suma a la Liberación Nacional, el peronometro está en terminar con la patria financiera y poner al capital en función de la riqueza del pueblo argentino.