Las fiestas
Por Daniel Prassel.
Saludos navideños estimadxs lectores, espero de corazón hayan podido celebrar rodeadxs de afecto y cariño, cuidándose, pero por sobre todas, sabiendo que este difícil año que empieza a despedirse, nos augura el inicio de otro no mucho más sencillo sino por el contrario, se viene un 2021 que indefectiblemente nos exige más organización, más compromiso y más ovarios y huevos para tomar las decisiones necesarias que nos hagan recuperar iniciativa política real y con ella vigorizar nuestro Frente de Todos de cara a las elecciones de medio término.
Hoy pretenderemos reflexionar sobre distintas cuestiones, tratando desde el humilde enfoque que podemos acercar, seguir aportando al debate político actual acerca de cuáles deben ser las prioridades ineludibles de nuestro gobierno, balanceando ya el primer año de gestión.
Lo primero que se me viene a la cabeza es la estadística de la UCA, que, si bien le conocemos muy bien el pelaje, en esta oportunidad no he escuchado desde ninguna tribuna que se salga a desmentir o confrontar esos indignantes números que nos dicen que, de diez niños, seis son pobres.
Ahora bien, entendiendo que esta proyección sea acorde a la realidad, no les parece que es buen momento de empezar a definir prioridades urgentes, digo y esto no pretende ser una crítica sin sentido, uno a veces se encuentra con debates muy acalorados y que incluso suelen ser muy atractivos, pero para quienes no morfan o pasan hambre eso es lejano y poco termina importando, hoy necesitamos gobernar sin titubeos y empezar a tener gestos más claros.
Supo nuevamente Cristina (cuando no) diagnosticar algo que se advierte sin ser ningún especialista, hay personas que no están a la altura de las circunstancias que este momento histórico requiere, ya que además de delicado es crucial para definir nuestros próximos veinte años, acá si no podes poner el grito en el cielo y resolver lo que te toca, bien lo dijo Cristina, “Hay que buscarse otro laburo”, creo que buena parte de los problemas actuales refieren a eso que tan maravillosamente plasmo nuestra vicepresidenta en el acto en La Plata.
Si me preguntan rapidito, la prioridad número uno, es la mesa de las y los argentinos, hasta el hartazgo escuchamos que producimos alimentos para 400 millones de personas, ¿y acá no podemos alimentar a 44 millones? Si algo ha hecho bien el Peronismo ha sido garantizar el morfi, hoy creo que no se puede esperar más para poner freno a los aumentos que sacuden los principales productos que consumimos como Pueblo, pan, harina, carne y leche, además son irreemplazables en la formación integral de nuestrxs niñxs, no podemos discutir otras políticas si no solucionamos de una vez esta historia.
Si pudimos declarar de interés público tantas cosas, que estamos esperando para decir de una vez, leyes mediante y dispositivos que garanticen cumplimiento efectivo, que con la comida no se jode más, ver cómo se va por las nubes el precio de la carne, debo reconocer, me aterra, porque también el acceso a la carne es un índice que nos grafica la desigualdad estructural de primera mano, y siendo honestos, tres días de ofertas para comprar tres cortes, no pareciera ser la solución a este kilombo.
Quisiera también agregar algo que me parece muy interesante, que tiene que ver con el Lawfare, tema que ya hemos abordado en notas anteriores, aquel que crea que ese mecanismo tiene por objetivo encarcelar específicamente a alguien se equivoca, es un arma de carácter ejemplificadora y disciplinadora, para que justamente quienes no van en cana y siguen ocupando cargos ni siquiera imaginen tomar decisiones a favor del Pueblo que toquen intereses corporativos o de los poderes facticos, Cristina nuevamente maravillosa dando cátedra sobre esto.
Por hoy vamos a dejar acá, sin pasar a otras prioridades, enfatizando nuevamente en la comida de las y los argentinxs, hay que actuar ya y sin vueltas, con la dureza de la ley a quienes especulan, a quienes nos pulverizan el salario aumentando todo, garantizando el alimento a quienes no tienen un ingreso de la manera que sea, esa debe ser nuestra tarea principal, no se sostiene ningún proyecto político si no atacamos este flagelo inmediatamente.
Para los tiempos que se avecinan, habrá que darlo todo, con audacia y decisión, sin tibiezas, o vimos un Macri tibio a la hora de reprimir, ¿ajustar o robar? Debemos empezar a transitar un camino firme, resaltando por supuesto todo lo bueno que se realizó ante la situación de excepcionalidad que nos toca vivir, pero sin renunciar a nuestro mandato de vida, ese que nos dice que hay que lograr una Patria justa, libre y soberana.
Honrando el legado del General y Evita, el amor de Néstor y los ovarios de Cristina, que con sus matices, nunca fueron contra el Pueblo, sino que justamente dieron todo en pos de defenderlo y protegerlo, quien no pueda hacer lo que le fue conferido por la voluntad popular, que se vaya, que abra paso a miles de compatriotas dispuestxs a poner el corazón para sacar adelante nuestro hermoso país, es mentira esa recurrente frase de que “no hay cuadros”, zoncera que debe ser desterrada, está lleno de cuadros, hay que permitir que surjan y que lleguen, no que sean relegados por tipos y tipas sin alma que solo quieren servirse del estado y no servir en el estado.
Dijimos “Volver Mejores” es momento de que pasemos de la consigna, a la realidad efectiva.
En la vida argentina ya no hay lugar para el colonialismo económico, para la injusticia social, ni para los traficantes de nuestra soberanía y nuestro porvenir.”
Cra Evita
Más Estado, Más Solidaridad, Más Comunidad, como nuestrxs 30.000 nos enseñaron.