Full picado en Túnez: Saïed echa al primer ministro y suspende las actividades del parlamento
Por Ezequiel Vega.
Crisis económica y política sobre el fondo de la crisis sanitaria. A partir de la decisión del jefe de estado Kais Saïed, este 25 de Julio, de congelar el funcionamiento del poder legislativo y quitar las inmunidades de sus miembros y destituir a su Primer Ministro, para el presidente de la Asamblea de Representantes y líder del poderoso partido islamista Ennahda (partido del renacimiento), Rached Ghannouchi, se consolida un “golpe de estado” contra la llamada primavera arabe del 2011.
Cientos de manifestantes se concentraron en la capital, principalmente los militantes de Ennahda, la primera fuerza política del congreso, aliada al gobierno hasta los últimos acontecimientos. “Lo que hizo Kais Saïed fue un golpe contra la revolución y contra nuestra Constitución, y los partidarios de Ennahdha, así como el pueblo tunecino, defenderán la revolución”, publicaron desde el partido islamista en un comunicado en su página de Facebook.
La Nación tunecina transita un bloqueo institucional luego de que el congreso apruebe reformas en el Poder Ejecutivo, con cambios en 11 de sus 25 ministerios, y que el presidente se negara a aceptarlas, al considerar que no fue consultado previamente, sumado a las sospechas de conflicto de intereses que “planean” algunos de los nuevos miembros.
A su vez, la puja de poder y la tensión política es acompañada de la crisis económica y social, donde los niveles de desempleo y desigualdad se profundizaron con la pandemia. Ante la cuarta ola de coronavirus, que ya se costo 18 mil muertes y la tasa mas alta de mortalidad de la Unión Africana ,el gobierno se vio obligado a pedir ayuda a la comunidad internacional ante la falta de las vacunas y de equipos médicos suficientes.