El Tiro Por La Culata
Por Daniel Prassel.
Esta vez compañerxs nos toca arrancar con un tema bastante triste, y que esperamos, pueda ser esclarecido inmediatamente, porque lo sucedido con el ataque al Diputado correntino Miguel Arias no puede ser un tema menor de la agenda o incluso legitimado desde algunos discursos opositores a los que ya estamos acostumbrados.
Acá tiene que salir toda la dirigencia política en su conjunto, porque no debemos olvidar que venimos un hecho terrible en Lanús (Abril 2021) donde en un episodio callejero un militante sufrió el corte de dos dedos o el bombazo en una unidad básica en Bahía Blanca (Mayo de 2021), lo que nos demuestra sin ninguna duda que hay una escalada de violencia política que debe ser repudiada enfáticamente por todo el Pueblo.
Cuando le pusimos fin a la Dictadura Cívico-Militar en 1983, sabíamos muy bien que no serían nada fácil los días por venir, pero aun así caminábamos y elegimos seguir caminando con la certeza de que la violencia no puede ser el mecanismo de discusión de ningún tema o cuestión política.
Desterrando de una vez y para siempre la teoría de los dos demonios, pudimos exponer ante la comunidad y el mundo el horror de lo que represento y arrebato el plan sistemático y genocida que sufrimos como Pueblo, se pudo observar con lujo de detalles hasta dónde puede llegar el odio si no se le pone freno.
Estando aquí en una situación y contexto diametralmente opuestos tampoco debemos relajarnos y permitir esta serie de ataques infames, amenazas recurrentes y encima silencios por parte de las demás fuerzas políticas, porque como bien se sabe, siempre la violencia arranca de menor a mayor, y dispararle a un diputado entre la gente ya toca limites que son intolerables para la vida en democracia.
Hay que investigar y caerle a quien o quienes sean responsables con el riguroso peso de la ley, mostrarlos y exponerlos al Pueblo para que puedan ser repudiados, debemos poder llegar hasta las últimas consecuencias con este hecho, no será lo mismo nuestra sociedad si esto quedase impune.
Por otro lado, y como venimos reflexionando en notas anteriores, también hay que insistir en combatir con todos los argumentos y fundamentos necesarios en el marco del debate democrático, aquellos discursos que engalanan los personeros de la oposición que solo contribuyen a naturalizar esta violencia mientras destilan odio en cada una de las palabras que enuncian.
Después de ver lo de Corrientes, ya no es gracioso escuchar a Milei decir “Vamos a quemar el Banco Central” porque ahí puede estar acuñándose gracias a la irresponsabilidad ciudadana de este personaje, una manera de pensar violenta, autoritaria y reaccionaria, que en su ímpetu de confrontar al sistema decida utilizar métodos violentos para supuestamente combatirlo y se ponga en juego en esa locura, el bienestar general de todas y todos.
Empecemos a derrotarlos en las urnas antes de tiempo, contando esto que ha sucedido y llamando al dialogo real entre fuerzas políticas, maduro, honesto y con contenido, sin tintes de ninguna actitud violenta como las empresas masivas de comunicación que siempre exacerban los ánimos para llevarnos al pobres contra pobres, no caigamos en esa trampa que nos ponen cotidianamente.
Sigamos llevando la propuesta política que nos convoca, la del trabajo, la educación, la salud y un país mejor para todas y todos, sin distinciones, un Pueblo con memoria que no se deja avasallar en sus derechos y que condena de la manera más categórica posible cualquier hecho de estas características, porque nos duele aun lo vivido, porque se luchó mucho para recuperar la democracia y porque entendemos y comprendemos que siempre será perfectible mientras nos demos la posibilidad de la lucha política en el marco del respeto y el debate de ideas y proyectos.
A no aflojar compañerxs, avancemos a esa comunidad por la que tanto luchamos y que soñamos cada día, donde el amor siga siendo la principal bandera, el principal argumento y la principal herramienta de la construcción de la vida que realmente queremos.
Más Estado, Más Solidaridad, Más Comunidad, como nuestrxs 30.000 nos enseñaron.