Días negros
Por Nieves Viviani.
No dejés morir a los muertos de muerte solitaria,
atravesá el bosque, la noche;
las raíces incendiadas;
mordé la fruta amarga de los dias negros,
quemá todas tus ropas,
rompé cada palabra heredada
a fuerza de esclavismo y látigo,
quemá tu música,
quemá tu venerada música,
tu llanto,
tus insignificantes diarios,
tus modos de educado desden;
tu silencio altivo,
tus enloquecidas brújulas,
mojá tus lámparas;
sangrate lentamente,
quemate suavemente,
hacete vulnerable
hasta la desposesión.
Después raspá la carne
hasta que duela,
hasta que duela,
cómo no dolerte
la carne, raspala
con sus nombres,
una espina cada nombre;
esos nombres que no figurarán
en calendario alguno,
y ni santos
ni dioses jamás protegerán,
tu carne deberá cuidarse sola,
tu carne deberá dolerse sola
entonces,
porque
ni altar
ni sacrificios
ni altos muros
van a separarte de la muerte.
La muerte, aureolada
indiferente,
extediéndose soberanamente
y a destajo,
entre humedales
y frescos pastos de orillas neblinosas,
entre bajíos
y estolas de dulce brisa perfumada.
Un muerto no debe ir a la muerte solo.
Vas a anotar cada nombre
en cada río
en cada parcela de tierra
de la espesura de tu carne
– de lo que reste de tu carne-
vas a escribir cada nombre,
vas a memorizar cada nombre
hasta ordenar el largo y monódico poema de los muertos,
nombres declamados uno a uno,
los muertos,
todos,
cantados, recitados, declamados a viva voz
en el hueco solitario de la ciudad solitaria,
a viva voz nombrados
uno a uno
para que nadie olvide,
– ni propios ni extraños olviden-
para que nadie vaya a su propia muerte,
solitario y en silencio,
como si el viento fuera todo
y ciertamente ;
pero antes aprenderás a decir los nombres
con amorosa dicción-
cada nombre una espina
y un jirón de carne en esa espina
uno a uno todos
serán dichos por tu voz,
y no importa cuan rota estés,
cuerdas vocales,
alma
y voz.
Sólo eso importa.
Va a dolerte, tiene que doler:
enumerar los nombres de los muertos
solitarios,
amados,
solitarios muertos,
en el silencio culpable de los vivos.