Crónica de desencuentros/encuentros (2)
Por Oscar Rodríguez.
1896-2021 – 125 años de historia.
De un partido que dejó el legado de hombres y mujeres que pensaron un país diferente. Un país más justo y solidario, basado en la justicia social promoviendo el rol reparador del estado.
Pero que también dejó el legado de hombres y mujeres que interpretaron erróneamente las vicisitudes históricas coyunturales del panorama nacional e internacional.
Comprender la historia para no volver a cometer los errores del pasado y comenzar a construir sobre bases firmes que se apoyen en el legado de esos hombres y mujeres que quisieron construir un espacio que albergue los sueños de un pueblo, con la concreción de un país justo y solidario.
El partido socialista nació con ese anhelo de la mano de Juan B Justo allá por 1896.
Donde en la primera edición de la vanguardia nos decía:
“hay que construir una alternativa política al pillaje y la plutocracia. Los Pereyra, los Unzué, los Udaondo, tan ricos que no tendrían por qué robar, son hoy los preferidos para los altos puestos públicos por los otros ricos, cuya única aspiración política es que sus vacas y ovejas se multipliquen sin tropiezos”.
Con esas ideas de equidad nacía el socialismo, 125 años después, convertido en un despojo causado por los intereses mezquinos de los que se apropiaron de esos valores, pero solamente en el discurso.
La falta de comprensión, de análisis político, de un serio debate interno, la inoculación de odio los llevó a enfrentarse al movimiento peronista que nacía con la intención de representar a los trabajadores en defensa de sus intereses.
Un peronismo que se enfrentaba decididamente al poder económico internacional.
No comprender el movimiento peronista género peleas intestinas teñidas de odio e incomprensión dentro del socialismo, que aún hoy persiste.
La incomprensión del fenómeno peronista derivó en caracterizar al movimiento como un régimen fascista. Se ignoró el progreso que le permitió a los trabajadores la política social y económica llevada adelante.
Política basada en los preceptos socialistas de justicia social.
Sin embargo, hostigaron al nuevo líder a partir de creer que sus seguidores no pertenecían a la clase trabajadora, sino que eran parte del lumpen.
Incorporaron conceptos como “democracia” y “libertad”, cualquier parecido con la actualidad es pura coincidencia…
16 de septiembre de 1955.
Decididamente el PS posicionado en la vereda antiperonista, formaba parte de la “revolución libertadora”, aclamaba desde la vanguardia la alegría del derrocamiento de un presidente de la democracia.
A días del golpe daban a conocer este comunicado:
“los socialistas argentinos saludan emocionados el gran esfuerzo de liberación de la tiranía que acaba de realizar el pueblo argentino con la ayuda principal y decisiva de la aviación, de la escuadra y del ejército, y confía en que la magna tarea de reordenamiento que espera al gobierno militar, será conducida hasta el fin con la misma decisión, cordura y patriotismo con que ha sido llevada hasta aquí”.
Esa aviación que era venerada en este comunicado, provocó más de 300 muertes y miles de heridos en un bombardeo a la población civil en la plaza de mayo, meses antes del golpe.
La emoción del socialismo se vería reflejada en las páginas de La Vanguardia del 20 de octubre de 1955 donde Américo Ghioldi escribía:
“La revolución fue argentina por su largo aliento, por la conciencia que la preparó, por los corazones que la ejecutaron, y por el sentido democrático de su proclama (…) Su profundo significado histórico reside en que es una revolución libertadora que separó la cabeza enferma del cuerpo sano de la nación, y abre cauces a las múltiples energías creadoras de los hombres”
Esta emoción y entusiasmo salieron de las páginas de la vanguardia y se materializó en la participación del gobierno asesino.
Alfredo Palacios, designado embajador en la República Oriental del Uruguay, Américo Ghioldi, Alicia Moreau de Justo, Nicolás Repetto y Ramón Muñiz, integraron la Junta Consultiva Nacional.
Esto sí, configura un profundo desencuentro, no solamente con el peronismo si no también con el pueblo argentino y con las propias bases ideológicas y morales del propio partido.
Ese árbol que nació en 1896, al ser regado por la incomprensión y el odio comenzaba a pudrirse y de sus raíces nacen vertientes el PSArgentino (luego PSP) y el PSDemocrático.
En el PSA se alinearon figuras como Alfredo Palacios, Alicia Moreau de Justo y Carlos Sánchez Viamonte, mientras que en el PSD se mantuvieron los “Giholdistas”.
El ala moderada y el ala liberal.
En las elecciones de 1958 el sector “anti Giholdista” proclamará como candidatos a la presidencia a Alfredo Palacios y Carlos Sanchez Viamonte. Recordemos que el peronismo estaba proscripto.
Finalmente llegaría a la presidencia del país Arturo Frondizi.
Ambos sectores del socialismo mostraban posturas irreconciliables. (PSA/PSD).
Mientras que el país era jaqueado por el poder económico internacional el socialismo se partía en pedacitos.
Repasando lo que dejó este desdoblamiento de partidos surgidos de aquel fundado por Juan B. Justo.
El PS luego de una muy mala interpretación del fenómeno peronista se parte en el año 1958, surgiendo así el partido socialista argentino y partido socialista democrático.
El PSD tomó una fuerte impronta antiperonista de la mano de Américo Ghioldi.
Demostrando posteriormente su apego por los gobiernos militares donde llegó a ser embajador en Portugal en el denominado proceso de reorganización nacional.
Me exime de mayores comentarios….
Mientras que el PS Argentino que presentaba cierta permeabilidad al peronismo, comenzó un fuerte debate interno, que lo llevó a la ruptura en 1965.
De esta nueva división deriva el PSPopular y el PSAutentico.
Los tres tomaron caminos diferentes, hasta que en el año 2002 se conforma la Unidad Socialista con el PSP y el PSD, quedando afuera el Partido Socialista Autentico.
En el 106 aniversario de aquel partido creado por Juan B Justo, llega la unificación.
En esa jornada memorable Alfredo Bravo remarcó:
“desde su origen el socialismo tuvo una razón de ser: enfrentar las injusticias que producen sistemas políticos y económicos pensados para bien de unos pocos, y trabajar para construir modelos más justos, más humanos y solidarios”.
De esos brotes que comenzaban a aparecer de aquel tronco que personajes como Ghioldi pudrieron, ahora sí, parecía que el PS se encaminaba a tomar su lugar en la historia Argentina. Para ser el fiel representante de la clase trabajadora.
Por supuesto que este renacimiento tendría que llegar con una fuerte autocrítica desde el seno interno, cosa que no sucedió.
El eje que se había encauzado provisoriamente, comenzó nuevamente a correrse hacia la derecha, tanto se corrió que el ex gobernador de Santa Fe, Hermes Binner llegó a aceptar que el espacio creía en la mano invisible del mercado.
La política de alianzas llevadas adelante por el reunificado PS lo pusieron en la Alianza que llegó al gobierno de la mano de Fernando de la Rúa.
La gestión del presidente De la Rúa, luego del menemismo, terminó de hundir al país, sumiendolo en un caos económico y social que derivó en la crisis del 2001.
Otra mala lectura de la coyuntura del PS.
La impronta Ghioldista se va a acentuar con la llegada del Kirchnerismo.
Lo cierto es que nuevamente otro movimiento surgido de las bases del peronismo pone al socialismo en jaque.
El Ghioldismo dejó herederos, Roy Cortina.
Quien en sus ansias de utilizar al PS en beneficio propio lleva adelante una alianza con la derecha retrógrada.
Al igual que Ghioldi con la “revolución libertadora” Roy queda embelesado por la “revolución de la alegría” y se pega al macrismo.
No se entiende si es una alianza política motivada por la cerrazón del análisis coyuntural de la realidad nacional e internacional o es una alianza motivada por negocios de tipo inmobiliarios u otros intereses económicos.
Quién lo sabe…
La realidad es que esta mala lectura lleva a un Kiebre nuevamente del PS.
El espacio liderado por Jorge Rivas, que apoya las políticas económicas y sociales implementadas por Néstor Kirchner es expulsado del PS.
La fuga del zoológico socialista de los integrantes del futuro espacio que será una nueva escisión, deja encerrados en exclusividad a los gorilas Ghioldistas dentro del mellado partido.
La interpretación correcta de los eventos políticos a nivel nacional e internacional lo llevan al Dr. Jorge Rivas a lanzar la Unidad Socialista Para la Victoria.
6 de agosto de 2011
Lugar: Constitución. Facultad de Cs Sociales UBA. Santiago del Estero 1029.
En el barrio CONSTITUCIÓN muy cerca del barrio de Montserrat.
Como si las coincidencias, primero por la cercanía de donde se constituyó el viejo socialismo en 1896 y segundo por el nombre del barrio, pretendieran que esta vez sí, el socialismo se pueda encauzar definitivamente rescatando su identidad histórica.
Se lanzaba allí la Unidad Socialista Para la Victoria (USPV)
Decía el dr. Rivas:
“Es un período en que su conducción nacional ha alineado al PS con las expresiones políticas de la derecha y ha eliminado la posibilidad del disenso en su interior”
Nace un nuevo encuentro entre dos fuerzas que surgieron para la defensa del pueblo trabajador, para el engrandecimiento de la nación y la promoción de la justicia social.
Un nuevo brote de todo aquello que terminó en podredumbre ideológica e intelectual.
Dejemos a los extraviados dirigentes del actual sello, que en definitiva es lo único que les quedó, encerrados en el zoológico libertario de la ignominia y la traición de los ideales del verdadero socialismo.
Los socialistas tienen la exigencia de revisar los prejuicios en relación al peronismo, analizar la historia imponiendo pensamiento crítico y entonces si salir del zoológico para decididamente abandonar el traje de gorilas que les quisieron imponer.
Abonar y regar el nuevo brote que nace transitando juntos para la construcción de una sociedad más justa.